La actividad de posventa reportó a los 2.143 concesionarios existentes en España unos ingresos de 5.595 millones de euros en 2024, lo que supuso un aumento del 5,1% respecto a la registrada en 2023. Una cifra alcanzada tras la apertura de casi once millones de órdenes de reparación y que supone casi el 12% de las ventas totales registradas por los concesionarios.
El crecimiento obedeció sobre todo al aumento del precio del recambio utilizado para las reparaciones y a la apertura de nuevos centros de la red marquista, que suma 2.143 concesionarios, 137 más que el año anterior, revirtiendo así la tendencia de estabilidad o disminución del número de puntos de venta registrada en los tres últimos años.
Los concesionarios españoles alcanzaron el año pasado un récord de facturación de 48.406 millones de euros (+5,8%), con una cifra de empleo directo también en máximos, con casi 164.000. Todos estos datos se recogen en la memoria anual de Faconauto y fueron expuestos por José Ignacio Moya, director general de la asociación de concesionarios, durante la presentación de los resultados de una encuesta de Sigma Dos realizada a 5.000 conductores sobre la compra de coche nuevo y el papel de concesionario en los hábitos de los usuarios.
La actividad de venta de vehículo usado, de tanta incidencia en el taller, generó una facturación de 13.109 millones de euros para los concesionarios en 2024, cifra que representa un aumento del 13,5%. El V.O supone ya algo más de la cuarta parte de los ingresos de los concesionarios.
La memoria de Faconauto del año pasado revela también que el número total de centros (concesionarios más puntos de la red secundaria y servicios oficiales sin venta de vehículos) de la denominada distribución oficial suman un total de 5.358 instalaciones (casi 500 distribuyen ya marcas chinas de vehículos), con una media de 31 empleados por cada una de ellas.
La rentabilidad media sigue siendo el principal reto al que se enfrenta el sector de la distribución oficial de vehículos. En 2024 ni siquiera llegó al 1% sobre facturación (0,92%). El aumento de los costes operativos, las inversiones en sostenibilidad, el menor margen en vehículos nuevos y la presión fiscal explican esta caída, asegura Faconauto, que asegura que la mejora de la rentabilidad no depende solo del volumen de negocio, sino de una mayor eficiencia y del acompañamiento institucional.
Con un parque con una antigüedad media por encima de catorce años y un año 2024 que cerró algo por encima del millón de matriculaciones de vehículos de turismo, precisamente es la “vejez” del coche y/o la cantidad de averías constantes que genera su vehículo el principal motivo que esgrime casi la mitad de los conductores que reconoce estar pensando en cambiar de coche y comprar uno nuevo en los próximos doce meses.
Así lo revela la encuesta de Sigma Dos, que aporta otros datos destacados como que el precio sigue siendo el factor más decisivo a la hora de decantar la decisión de compra del automovilista, seguido por el consumo y la fiabilidad de la marca, aunque cada vez se valora más la rapidez de entrega.
Mejor en el concesionario
El estudio de Sigma Dos para Faconauto reafirma asimismo la preferencia por el canal del concesionario en el proceso de compra de coches en España. El 99,5% de los compradores potenciales tiene prevista la visita a una concesión en su próxima operación, establecimientos que obtienen una nota de 7,9 sobre 10 entre los usuarios que han adquirido un coche recientemente. El 40,4% de los usuarios sigue pensando que el concesionario es la fuente de información más influyente a la hora de tomar la decisión.
La encuesta ratifica también que, sin ayudas a la compra, la transición hacia modelos electrificados no avanza. Casi el 38% de los usuarios consultados no se plantea adquirir alguno de ellos sin incentivos directos y solo el 41,7% lo haría si las ayudas son claras, accesibles y libres de trabas burocráticas. En general, dos de cada tres usuarios descartan por ahora la compra de un coche eléctrico, según los resultados de la encuesta de Sigma Dos. De esta forma, casi el 75% de los españoles en la actualidad se decanta por un vehículo de combustión, gasolina, diésel o híbrido no enchufable.